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Director de Hotelga Araucanía manifiesta preocupación para el rubro del turismo

Con más de 1 año de angustia e incertidumbre para muchos emprendedores y emprendedoras del turismo en La Araucanía, afectados primero por el estallido social y luego por la pandemia, sin poder comercializar nuestro destino para obtener ingresos que permitan sostener los empleos, cumplir obligaciones y mantener los negocios a flote… Ahora, iniciando la temporada de verano, se añora la actividad asociada a balnearios, playas y sol, configurando la llamada “temporada alta” que permitía a muchos emprendedores del turismo vivir durante el año.
Sin duda la realidad ha cambiado abruptamente y la anhelada temporada de verano se vislumbra desafiante y adverso, lo que nos obliga a pensar y a preguntarnos: ¿Cómo hacer frente a esta dura realidad? Sin duda una interrogante muy difícil de responder.

Sobreponerse al gran desafío que enfrentamos en La Araucanía, teniendo todos los ingredientes para lograrlo, un sinnúmero de parajes naturales privilegiados, una variada oferta gastronómica y de alojamientos, termas, festivales y fiestas costumbristas, que pasan a ser elementos insuficientes ante las interminables medidas restrictivas que nos impone la pandemia, pues entendemos que la salud es prioridad y ante tal adversidad, aflora la resiliencia inagotable de los emprendedores y emprendedoras de nuestra región.

La principal forma de enfrentar la adversidad y el desánimo, es trabajar unidos y coordinados entre en el sector público y privado, para generar condiciones, adecuaciones y protocolos que permitan a nuestro valioso y único turismo de La Araucanía, desarrollarse durante el verano en forma segura y tranquila. También es fundamental que la población en general seamos responsables y no nos relajemos con las medidas sanitarias.

Por último, me parece absolutamente necesario que el gobierno actúe coordinadamente entre los diferentes ministerios, cada vez que implementen o modifiquen las medidas del plan “paso a paso”. No puede ser que, mientras el Ministerio de Economía, otros servicios públicos y municipios, promueven y apoyan a los emprendedores, tales como restaurantes y otros, para que puedan desarrollar su actividad económica con adecuaciones y estrictos protocolos sanitarios, que implican inversiones y costos asociados, y acto seguido, el Ministerio de Salud modifica abruptamente la fase en las comunas y ciudades, con restricciones y largas cuarentenas, que implican retrocesos y nuevas angustias para muchas personas que necesitan imperiosamente poder funcionar, no para generar ganancias, sino simplemente para sobrevivir.