Tras la suspensión de la audiencia de preparación del juicio oral por el crimen de la familia Luchsinger Mackay en Vilcún en la región de la Araucania, quedó al descubierto que una de las pruebas que estaba en poder de la fiscalía, se había perdido. La evidencia es una declaración de un carabinero, tomada el mismo día de los hechos y que sería contraria a lo sostenido por José Peralino Huinca, el testigo clave del Ministerio Público. Karina Riquelme, abogada de José Tralcal, explicó que declaración “habla del avistamiento de una camioneta blanca que también coincide con lo que dice Cenco, que son las comunicaciones que tiene Carabineros esa noche, y se contrapone a la declaración de José Manuel Peralino, que señala que (los imputados) se trasladaron en camionetas oscuras y una roja. Esta declaración es muy importante para la defensa, puesto que contradice la prueba clave del Ministerio Público” declaró la defensora a un medio Capitalino. Respecto a al prueba, se perdió debido a el computador en donde estaba guardada en la Tercera Comisaría de Padre Las Casas, fue formateado, eliminando toda su información.Debido a esta situación, la defensa de los 11 imputados en la causa evalúan pedir el sobreseimiento temporal del caso. “Para nosotros este antecedente es importantísimo, porque podemos refrescar la memoria de ese carabinero en el juicio oral”, declaró el defensor penal mapuche Mario Quezada.
