En el marco de trabajo asociado al desarrollo de la colecta de Productos Forestales no Madereros en la Macrozona Cordillera Pehuenche de la Red SIPAN -Sistemas Importantes de Patrimonio Agrícola Nacional-se realizó un segundo taller en la comuna de Melipeuco sobre recolección sustentable y modelos de negocio guiado por el Instituto Forestal INFOR, destinado a recolectoras y recolectores de la zona. Este taller se realizará en las cuatro comunas de la Red SIPAN de esta Macrozona: Alto Biobío, Lonquimay, Curarrehue y Melipeuco, todos durante este segundo semestre de 2021.
En estos encuentros, relata la coordinadora de la Macrozona Cordillera Pehuenche de la Red SIPAN, Evelyn Osorio, se priorizará una canasta asociada a la recolección de la Macrozona con el objetivo de reconocer y conservar cultivos y prácticas ancestrales y sustentables de la comunidad, y comprende aspectos más técnicos y científicos proporcionados por INFOR. “Es importante poner en valor la recolección sustentable y comprender que no estamos solos, que vivimos en un entorno con otras especies”, destacó. A su vez, señala que es necesario divulgar estos saberes entre los actores que visitan y son parte del territorio, “con estos talleres se busca valorizar el oficio del recolector y recolectora” afirma.
Por otro lado, el seremi de Agricultura, Hans Curamil, explicó que “este taller está en la línea que impulsa el Ministerio sobre el desarrollo rural y la agricultura familiar y es un aporte para mejorar las condiciones de vida y aumentar las oportunidades de las personas que habitan territorios rurales, sobre todo los más alejados de las zonas urbanas, como es el caso de Lonquimay, Melipeuco y Curarrehue. En ese sentido la labor que la Red SIPAN y los organismos asociados desarrollan mediante esta iniciativa es fundamental para conservar y preservar estas costumbres ancestrales de nuestras comunidades indígenas, que es parte del patrimonio cultural inmaterial de los habitantes de La Araucanía y que no podemos permitir que desaparezcan”, mencionó el encargado del agro regional.
A su vez, Katherine Schuster, encargada regional de SIPAN de INDAP Araucanía señala que “estos talleres dan mayor importancia a los recursos naturales que se están agotado debido al mal uso que le dan otros, ante ello se buscan fortalecer las medidas para prevenir el mal uso de la recolección”. Además, como apoyo en fomento productivo que brinda INDAP, destaca el trabajo realizado, “en este caso apoyamos a agricultores que se dedican al turismo, específicamente en el desarrollo de agro-elaborados a través de resoluciones sanitarias, formalización, entre otros”.
Según INFOR, en la canasta SIPAN de la zona surgió en primera prioridad el piñón seguido por digüeñe, changle, gargal, rosa mosqueta, maqui, lleuque, morchella, hierbas medicinales y en algunas zonas geográficas, la avellana y el lleuque.
En el caso del piñón, es importante respetar las épocas de cosecha, hay algunas malas prácticas que pueden dañarlo -como aporrear la araucaria, o tirar lazos para que caigan antes-, “esto afecta la calidad del producto, dura menos y baja su valor, pues se conserva en menos tiempo”, señaló Evelyn Osorio. También es importante dejar parte de esa recolección en el mismo suelo, pues otras especies lo aprovechan y colaboran en la regeneración de la araucaria.
Sabiduría ancestral
Valorar la sabiduría y prácticas ancestrales de las comunidades y recolectores y recolectoras de la comunidad pehuenche es uno de los pilares de la Red SIPAN, pedir permiso antes de entrar al bosque y decir su nombre en su lengua originaria, son pasos a considerar para un respeto mutuo. Luis Huenupi Trecaman, de la comunidad Andrés Huenupi del sector Alpehue de Melipeuco, señala que la recolección de Gülliw -piñón- es una práctica ancestral, antiguamente esta especie se explotó, pero señala que el Pewén ha vuelto.
“El Gülliw es un fruto antiguo que proviene de un árbol milenario, es un producto muy sano que ha aportado mucho a nuestras creaciones tanto mapuche como no mapuche, años atrás en un documental dije que, si llegara a desaparecer el pehuén, desapareceríamos como comunidad mapuche, eso no será así, creo que hoy se está fortaleciendo, pero hay que tomar medidas”, destacó.
Luis Huenupi cuenta que él y sus vecinos tienen campo con muchas araucarias, e invitan a la gente a buscar piñones, sin embargo, es importante saber cómo hacerlo de buena manera, “hay un conocimiento de cómo sacarlo, cómo entrar a la cordillera, nosotros como mapuche siempre pedimos permiso a la cordillera, hablamos con la naturaleza y luego entramos a piñonear o caminar”, destacó. Ante ello, señala que es importante invitar a las personas a que planten piñones, pues quedará para futuras generaciones, “así fomentaremos el pewén -araucaria- para tener alimento. Ojalá todos entiendan y colaboren en esto, les pido a la gente de Melipeuco o que vengan de afuera, que hagamos esto entre todos”, señaló.
Con relación al taller, Luis Huenupi nos cuenta que es interesante pues los fortalece como comunidad valorando lo que hay en la naturaleza -plantas y hierbas medicinales, hongos, frutos naturales, etc.-, “nuestra gente conoce todo, ahora podemos compartir con otras comunidades, otra gente, incluso de otros países, entonces es muy importante. Hay que informarse, conocer y aprender”, destacó.
Conocimiento tecno-científico
Óscar Larraín, investigador y coordinador nacional del área de Ecosistemas Forestales Nativos y Exóticos de INFOR, señala que dentro del área de Diversificación Forestal se encuentra la línea de PFNM, investigación y transferencia forestal que trabajan desde el año 2000. “Trabajamos con recolectores y su fortalecimiento, oficio que está algo escondido hacia la sociedad, pero que todos nos vemos involucrados por sus productos como alimentación sana tales como: rosa mosqueta, digüeñes, mora, nalca, todo tipo de hongos, el alimento y comida mapuche peweche y la importancia de los piñones para su cultura”, destacó el investigador, quien señala que lo más importante de este trabajo es rescatar y valorizar al oficio: a los y las recolectoras y sus productos desde la alimentación saludable.
Con respecto a la relación del conocimiento técnico-científico con los saberes de las comunidades, INFOR, señala Larraín, han pesquisado las mejores prácticas y técnicas de recolección de manera sustentable, “las comunidades y recolectores saben cómo hacerlo de buena manera pues llevan más tiempo de recolección sin dañar de forma importante la biodiversidad, sin embargo nosotros lo sistematizamos y ordenamos desde una perspectiva científica, y al explicarlo se logra entender el porqué de algo empírico, lo comprenden más profundamente”, destacó.
Por último, destaca el investigador, en la conversación que se da entre los participantes del taller y ellos como INFOR, “falta que logren empoderarse más y que se respete su cosmovisión, y desde nuestra perspectiva técnica apoyarlos en podas y en economía de subsistencia, es decir en una economía que calce con el triángulo de la sustentabilidad, que tengan sus propios cultivos en vez de caminar a la cordillera a recoger michay, o que tengan sus propias hierbas medicinales pues están desapareciendo producto de las veranadas y sobrepastoreo de carga animal”, señaló.